Papa Francisco: el pontífice que amaba el fútbol y era hincha fiel de San Lorenzo
En el país en donde osan llamar a Maradona Dios y en el que el Messi, el mesías, se llama Lionel, un tercer argentino es quizá el más conocido en el mundo. Hace una semana el papa Francisco se despedía del campo terrenal, para ir al campo celeste. Dedicamos El Deportivo de RFI al líder religioso más futbolero de nuestra era. Jorge Mario Bergoglio contaba que cuando era tan sólo un niño, 9 años para ser exactos, comenzó su historia de amor por uno de los equipos de fútbol de Buenos Aires, su ciudad natal. Su padre era devoto del San Lorenzo de Almagro y lo llevaba al viejo estadio Gasómetro donde descubrió la mística de la hinchada, de quienes le ponen la fé a un equipo para salga campeón. En 1946 lo vio ganar la liga argentina, por eso antes de escuchar el llamado para su vocación religiosa, Jorge Mario recibió el llamado del deporte rey. Jorge era "cuervo", como se le llama a los hinchas del equipo, apodo que nació del vínculo del club con la orden salesiana y el color negro de sus sotanas.Según un informe de la Asociación de Fútbol Argentino, AFA, San Lorenzo es el cuarto equipo con más hinchas en ese país con unos 3 millones. Tiene casi 90 mil socios, entre ellos estaba el papa Francisco con su carné número 88235. Escuche en el programa a los fanáticos del San Lorenzo sobre la importancia del religioso para la historia del club. Papa Francisco: el pontífice que veía el fútbol como un vector de pazEn El Deportivo de RFI también repasamos varios aspectos del Papa futbolero. De su relación con el deporte rey más allá de ser hincha. Conversamos con su amigo Enrique Palmeyro, Director Mundial Ad Honorem de Scholas Occurrentes, una fundación imaginada en 1998 por el entonces arzobispo Jorge Bergoglio.Ya nombrado máximo líder de la religión católica, lleva el movimiento de jóvenes por la educación a 70 países en el que el fútbol es utilizado como una herramienta educativa.“Con una pelota de trapo se hacen milagros”, dijo Francisco en 2019, tal vez resumiendo su visión sobre el fútbol como un fenómeno que trasciende lo deportivo. El pontífice, fallecido el lunes 21 de abril, a los 88 años, nos mostró su pasión por el balompié más allá del marcador, y la importancia que puede tener este deporte para unirnos y aprender a respetar al otro. Leer también¿La participación de hinchas en las protestas de los jubilados, catalizadora del descontento social argentino?